El viejo paradigma es mecánico; la Tierra se compara con
una máquina y se considera como materia muerta e inanimada. En el nuevo
paradigma, la tierra es Gaia, un organismo vivo, una comunidad biótica, un
sistema vivo que se auto-regula y auto-mantiene.
El viejo paradigma es dualístico, como lo definió René
Descartes y como es seguido por una mayoría o prácticamente todos los
científicos y organizaciones educativas. En este dualismo, la mente está separada
de la materia y además gobierna sobre ella. El nuevo paradigma no es
dualístico. Mente y materia son uno e inseparables. La física cuántica es la
física del nuevo paradigma, donde no hay distinción entre el observador y lo
observado.
(Satish Kumar en Soil, Soul, Society)
En
este viaje hacia el “bienvivir” en el que se han expuesto los principales
fundamentos del nuevo paradigma, voy a dar una vuelta de tuerca más definiendo
las principales características a tener en cuenta de cada uno de los tres elementos
de los anteriores artículos: el explorador en el primer artículo, el mapa en el
segundo y la brújula en el tercero. Explicitando y dando visibilidad a esas
cualidades, uno se podrá dar cuenta cuando se va acercando o alejando de ellas.
En este primer artículo de una nueva triada se expondrán las 3 dimensiones del mapa del bienvivir: el ser humano como individuo, la sociedad
y el Planeta. En un segundo artículo sobre el explorador, se definirá a
este por sus necesidades y potencialidades humanas dentro de esas 3 dimensiones. Finalmente, en el
tercero se expondrán diez propuestas o cualidades que la brújula tendrá en
cuenta para guiarse sobre ese eje del mapa tridimensional.
Fundamentos de las 3 dimensiones del mapa del Bienvivir:
Individuo, Sociedad y Planeta.
Como
se explicaba en el artículo “Ciencia Holística para el bienvivir: el mapa está vivo”, el mapa es una representación porque la realidad es cambiante en cada
instante, sin embargo, de manera simplificada creamos mapas o modelos que nos
puedan servir durante más tiempo. Al cabo de un cierto periodo, que no son los
segundos con los que la realidad cambia sino meses o años, renovamos el mapa.
Las guías de viaje, los mapas de carretera son, entre otros, ejemplos de
negocios basados en esa realidad cambiante.
Fue
Ken Wilber en su teoría integral quien planteó un mapa de la realidad con un
sentido holístico. Así el mapa de la figura siguiente divide la realidad en
cuatro cuadrantes, dos colectivos y dos individuales o bien dos interiores y dos exteriores.
Fuente: Libro "Breve historia de todas las cosas" de Ken Wilber
Así
Wilber en ese libro explica que:
“Todos los cuadrantes están relacionados entre sí, porque
todos son mutuamente determinantes, y todos son causa y a su vez efecto de los
otros”.
Para
ilustrarlo expone el ejemplo de un individuo que tiene el pensamiento de ir a una tienda para
comprar algo de comer. Ese pensamiento se correspondería con el cuadrante
superior izquierdo, que nadie excepto el individuo conocería. Sin embargo, si
en el momento de tener ese pensamiento, ese individuo hubiera estado en un
laboratorio donde le estuvieran tomando una resonancia magnética en el cerebro
podríamos ver “exteriormente” su comportamiento de “pensar” por medio de
imágenes del cerebro en un monitor donde se iluminarían las diferentes áreas
físicas del cerebro que intervienen en ese proceso. Entonces estaríamos en el
cuadrante superior derecho. El pensamiento tendría sentido dentro de un
contexto cultural del conocimiento de un lenguaje, cuadrante inferior
izquierdo. Por último, toda cultura tiene una correlación social en cuestiones
de tipos de tecnologías, factores de producción o instituciones que, en el
caso de las tiendas como tal factor, se
podría observar en el cuadrante inferior derecho. Es decir, si ese individuo ha
sido educado en una cultura occidental ha aprendido tanto la palabra “tienda”
en su idioma como su representación exterior física y su función. Si ese
individuo perteneciera a un pueblo indígena del interior del Amazonas,
probablemente su pensamiento no hubiera sido el de querer ir a una tienda sino
a lo mejor ir a una parte del bosque donde sabe que puede encontrar comida o
quizás tomar un arco, cerbatana u otro utensilio e irse a cazar. De esto
podemos extraer esa interrelación holística entre los cuadrantes individuales y
colectivos. Nuestros pensamientos y
acciones vienen determinados por la cultura y los medios de esa cultura. Pero
así mismo, nuestra cultura y medios también viene determinado por individuos
que abstrayéndose de la cultura en que viven, piensan, crean e innovan
transformándola. Es como el funcionamiento de la doble hélice de la espiral dinámica, por una parte las condiciones de vida nos afectan a nuestras
capacidades mentales y por otra enfocándonos en unas u otras capacidades
mentales nos adaptamos o intentamos cambiar esas condiciones de vida.
El
economista E.F. Schumacher en su libro “Una guía para perplejos” ya distinguía
cuatro “campos de conocimiento” diferentes, que se exponen a continuación y que
tienen cierta similitud con los diseñados por Wilber posteriormente.
Fuente: Elaboración a partir de Schumacher
Stephen
Covey en su libro “Primero lo primero: vivir, amar, aprender, dejar un legado”
también llegó a un modelo de cuatro cuadrantes para tratar la realidad
personal. Si extrapolamos sus dimensiones: Física-Social-Mental-Espiritual a
los cuadrantes se obtiene la siguiente figura.
Fuente: Elaboración a partir de Covey
En
1973, el investigador argentino Carlos Mallmann expuso una teoría sobre las
necesidades humanas y sus satisfactores. Para él, el ser humano necesitaba en
su desarrollo humano dos cosas importantes:
vivir (existencia y convivencia) y crecer (realizarse y superarse). De allí
extrajo sus 9 necesidades humanas (permanencia – protección – amor –
entendimiento – participación – recreación – creación – darse sentido –
sinergía) y sus satisfactores (intra-humanos, inter-humanos y extra-humanos).
En la siguiente figura extrapolo esas cuatro dimensiones al sistema de Wilber
interior/exterior o individual/ colectivo.
Fuente: Elaboración a partir de Mallmann
Posteriormente
el economista alternativo chileno Max-Neef que trabajó con Mallmann (y del que
me extenderé en el siguiente artículo de esta segunda triada), describió en su
tesis de desarrollo humano cuatro dimensiones para las necesidades
existenciales: Ser, Tener, Hacer y Estar. A esas necesidades existenciales
añadiría 9 necesidades axiológicas (subsistencia – protección – afecto –
entendimiento – participación – ocio – creación – identidad – libertad) lo que
le daría una matriz de 36 elementos. Esas necesidades se podían satisfacer en 3
contextos:
- En relación con uno mismo o una misma
- En relación con el grupo social.
- En relación con el medio ambiente.
Ken
Wilber simplificó sus cuatro cuadrantes en tres, al tomar los de la parte
derecha (exteriores) con la posibilidad de ser descritos con el lenguaje
objetivo del “ello”, el cuadrante
superior izquierdo descrito con el lenguaje del “yo” y el inferior izquierdo en el lenguaje de “nosotros”. Lo llamó el “Gran Tres” como muestra la figura
siguiente e hizo ciertas correlaciones con otros sistemas, como las disciplinas
tradicionales estética, ética y ciencia o la Belleza, Bondad y Verdad de
Platón. También lo vinculo a los tres mundo de Karl Popper (subjetivo, cultural
y objetivo), las tres pruebas de validez de Habermas (sinceridad subjetiva,
ajuste intersubjetivo, verdad objetiva) o la trilogía de Kant (crítica del
juicio estético, crítica de la razón práctica y critica de la razón pura).
Fuente: Libro "Breve historia de todas las cosas" de Ken Wilber
En
mi propuesta de creación de un modelo normativo para la sostenibilidad diseñé
también cuatro cuadrantes apoyados en los anteriores cuadrantes (principalmente
Wilber y Mallmann) con una pequeña alteración al modelo de Wilber. Al ser un
sistema normativo, es decir ideal, lo idóneo para la sostenibilidad sería
intentar comportarse adecuadamente con la Naturaleza, como así ha sido más o
menos durante miles de años en diferentes pueblos indígenas a lo largo y ancho
del planeta. Por ello el cuadrante conductual de Wilber lo convierto en Medio
Ambiente, quedando el sistema como se ve en la figura siguiente.
Fuente: Elaboración propia
Internamente,
la idea intencional del concepto
normativo “Bienestar Responsable”
para su posible realización conlleva un crecimiento interno donde el individuo se
va desarrollando y renovando
humanamente dentro de una cultura
consciente en la que participa y
transforma lentamente (deja un
legado) para que pueda primar una ética
global que englobe los desafíos humanos más importantes. Externamente, como
individuo refleja una conducta en
simbiosis con el medio ambiente o
Planeta del cual reconoce su importancia para su supervivencia de él y de la sociedad donde convive con otros individuos, con los cuales ha desarrollado unas
instituciones que velan por unos derechos
globales de todos ellos (bien como individuos, bien como colectivos) y del
Planeta en general.
De
la misma forma que Wilber simplificó las dos partes exteriores, se puede hacer
otro simplificación distinta, en este caso simplificando las partes inferiores,
la parte colectiva por lo que tendríamos una parte individual interior a la que
llamó “Bienestar Responsable” (Yo),
una parte colectiva, la sociedad donde uniría los cuadrantes Ética global y Derechos globales (Nosotros)
y finalmente la parte del Medio Ambiente
(Ello). Esto coincide con los satisfactores de Mallman (intra-humanos,
inter-humanos y extra-humanos), con los ámbitos de Max Neef (uno mismo, grupo
social, medio ambiente), con la triada propuesta por Satish Kumar (Soul, Society, Soil) y con la de este blog (Autonomía y Bienvivir, Sociedad y Planeta
Tierra). Por último, incluso Stephen Covey en su libro “Los 7 hábitos de la
gente altamente eficaz” proponía una triada dependencia-independencia-interdependencia
que se podría extrapolar a la estructura anterior. Si el individuo depende de
la sociedad (cuando nacemos dependemos de nuestra familia u otros individuos) y
posteriormente interdependemos con esta cuando adquirimos un rol más bien activo,
la sociedad, compuesta por todos sus individuos, depende completamente del
medio ambiente o Planeta. De este modo el Planeta con su perspectiva de vida de
millones de años, es indiferente a la perspectiva de vida del ser humano (de
hecho, lo más probable es la desaparición del ser humano antes que la
desaparición del Planeta). Así mismo, un
individuo en la sociedad en la que vive interdependientemente también tiene una
pequeña parte de independencia, esa que
le hace crecer, desarrollando sus propias capacidades o fortalezas
individuales, tomando sus propias decisiones más o menos libres.
La
siguiente figura nos muestra esas tres dimensiones que considero estructurales
en el proceso de bienvivir.
Fuente: Elaboración propia
Unas
dimensiones que deberían estar presentes en nuestra mirada o en nuestro mapa
del bienvivir. Sin ir más lejos, la economía global actual, apenas se fija en
el Medio Ambiente y con respecto a la parte social, esta es cada vez menos
relevante por lo que se podría diagnosticar que su foco principal es el
individuo, olvidando las otras partes del sistema. Los efectos sistémicos de
este foco en el individuo lo podemos ver en una sociedad enferma con un
incremento en el stress, las adicciones, la obesidad, la infelicidad, etc y un
planeta que está perdiendo diversidad, está contaminando océanos, ríos y aire,
está cambiando morfológicamente tan rápido que no le da tiempo al ser humano de
adaptarse (bosques, selvas, hielos desapareciendo).
Finalmente
para acabar y ya que me guio por un modelo constructivista, que cree una
diversidad de posibilidades, de las cuales algunas tengan éxito presentaré un
esquema en tres dimensiones que puede ser útil para generar ideas o para
estructurar nuestra mirada con unas gafas que permiten ver en 3D. Una mirada
que sea más profunda y que pueda permitir, quizás, nuevas ideas y soluciones.
Muchas de las ideas y conceptos con los
que pensamos e interactuamos están estructurados de forma bipolar, excluyentes
y a veces reduccionistas (blanco-negro; derechas–izquierdas; bueno-malo…), pero
si se incluyera un tercer elemento (en el caso de que sea posible), se crearía
un sistema mucho más complejo pero más real con tres elementos que requiere un
cierto equilibrio. Por ejemplo, en el caso de la política, la aparición en el
siglo XX de los partidos ecologistas rompió el espectro derechas-izquierdas.
La siguiente tabla contiene parte de una serie de
triadas que he ido encontrando en los dos últimos años en el que diversos
autores proponían tres elementos o triadas que conformaban la totalidad de un
concepto o idea. Como nos cuesta ver esas totalidades, para explicarlas
tendemos a reducirlo en varios elementos, sin embargo el todo es más que la
suma de las partes. Los he clasificado subjetivamente según una estructura
Yo-Nosotros-Ello. Cuando digo subjetivamente es que cualquiera de los términos
de cualquier triada puede ir en cualquiera de las casillas, no es algo
reduccionista sino más bien holístico. Sin embargo, de un modo práctico, los he
colocado en esas posiciones porque personalmente en el caso de que hubiera que
dividir ese concepto o idea en 3 elementos con esa estructura, cada uno de
ellos me parece que encaja mejor en esa posición.
Fuente: Elaboración propia
Como
ejemplo para aquellos que se quieran hacer una tabla de triadas, explicaré 2 nuevas que encontré en el último mes y como
las estructuro. La primera la encontré en el libro “Antifrágil” de Nassim Nicholas Taleb. Sorprendentemente,
su interesante libro se estructura con una larga tabla de triadas expuesta en
el prólogo bajo las columnas de frágil-robusto-antifrágil. Para él lo frágil es
algo que se puede romper muy fácil, lo robusto algo que aguanta choques y sigue
igual y lo antifrágil al contrario que lo robusto, ante los choques mejora.
Extrapolando a la estructura de la tabla, frágil, lo colocaría con el Yo ya que
un individuo me evoca fragilidad, robusto con Nosotros porque ante la
desaparición de algunos individuos, más o menos sigue igual y lo antifrágil con el Ello, ya que me evoca
el Planeta o Gaia ya que ante golpes o crisis, se vuelve a reinventar,
autoorganizándose de otra manera.
La
segunda triada la encontré en el libro “Neuroeducación” del investigador Francisco
Mora. En ese libro nos dice que “La
neurociencia cognitiva ya nos indica, a través del estudio de la actividad de
las diferentes áreas del cerebro, que sólo puede ser verdaderamente aprendido
aquello que llama la atención y genera emoción. Aquello que es diferente y
sobresale de la monotonía.” Por ello propones tres elementos
imprescindibles para aprender de los que habla largamente en el libro, la triada
atención-emoción-curiosidad. En esa tabla, personalmente colocaría la atención
en la columna del Yo porque me evoca algo que tiene que hacer el individuo,
emoción en la columna del Nosotros (somos animales emocionales y disponemos de neuronas espejo para empatizar con los demás) y la curiosidad
en la de ello, porque aquello que nos atrae o sobresale está en el exterior de
nosotros.
El
doble objetivo de mirar al mundo en esas 3 dimensiones es, primeramente, estructurar el
pensamiento hacia la complejidad de los sistemas, en lugar de ver una
respuesta en sólo blanco o sólo negro. Segundamente, como soy un seguidor del psicólogo y escritor Edward de Bono y de su
pensamiento lateral que genera posibilidades o ideas mediante distintas
estrategias diferentes a un pensamiento lógico, una estructura en 3 dimensiones
como la de la tabla puede generar ideas
o conexiones para resolver, quizás, problemas individuales, colectivos o
ambientales. Los tres elementos de una triada tienen sentido lógico entre
ellos, pero no tienen que tener una conexión lógica los elementos de una
columna porque cada elementos pertenece a un ente diferente. Sin embargo,
utilizando los elementos de las columnas como pensamiento lateral podrían
surgir ideas y soluciones. Por ejemplo, en la columna del Ello, Planeta o Medio
Ambiente, los elementos resiliencia, mapa, evaluativo, práctico, empoderar,
eco, ciencia… a modo de brainstorming podrían resonar en ciertos individuos a
decir ¡Eureka¡ ante problemas o ideas sobre el Planeta en las que ya estuviesen
trabajando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
NO SE ADMITEN COMENTARIOS ANÓNIMOS