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1. INTRODUCCIÓN
No hacen acto de presencia de forma materialmente evidente. No imponen su
majestuosidad como lo hacen las de verdad, aunque tienen un poder seductor
mucho más feroz, una carga simbólica aplastante y, no nos dejemos lo más
importante, son un instrumento de manipulación de las masas fenomenal y de
sofisticación creciente. Son las catedrales del odio, los cultos alrededor de
ideas reduccionistas muy peligrosas que emergen históricamente en todo su
esplendor en los momentos de profunda crisis y que suelen proyectarse sobre
determinadas figuras políticas.
Se ha hablado largo y tendido sobre la cuestión de la independencia de
Cataluña y el futuro así que no considero necesario seguir focalizando la
atención sobre este debate aunque lo usaré como pretexto para discutir una
tecnología muy muy potente, quizás la más potente que existe, la propaganda en
sus distintas modalidades, los orígenes de ésta en la sociedad de masas y como
a partir del reduccionismo semiótico estamos repitiendo muchos de los errores
históricos que nos han llevado a verdaderos desastres.
Comencemos por el principio, lo cual nos lleva a ofrecer un brevísimo
apunte sobre el estudio sistemático de los signos y como son usados para
relacionarse con ese mundo incierto de ahí afuera de cuñados y postverdades para crear los distintos
filtros que nos ayudan a codificar (formalizando en modelos) decodificar
(comprobando como esos modelos para adaptarse y revisar los supuestos de esos
mapas) la realidad y darle un sentido. Toca hablar de semiótica y de una de sus
modalidades más importantes, la lingüística.
2. AXIOMAS Y VISIÓN PRE-ANALÍTICA
Si bien el estudio sistemático de la sociedad, así como las ciencias
naturales han sido cuestiones centrales en la modernidad, no ha sido hasta este
siglo XX y especialmente ante 1) el desarrollo de la semiótica y la lingüística
con los trabajos pioneros de Saussure y Peirce, 2) el giro lingüístico de
algunas ciencias sociales en que la problemática sobre la representación
semiótica y su asociado significado cobra importancia. A nivel filosófico este
segundo punto se suele asociar con el postmodernismo, que definido en términos
de su pionero Lyotard es “la incredulidad con las metanarrativas”, es decir con
los axiomas de ciertos complejos semióticos para guiar la acción humana en una
pluralidad de modelos no equivalentes y es que como decía Box “todos los
modelos son erróneos, pero algunos son útiles”.
Este giro es a mi juicio muy de celebrar puesto que contribuye a
“de-construir” (del inglés deconstruct) principios que se asumían como
axiomáticos sin necesidad de demostración (ver apartado 4) y que al final tiene
un impacto en el discurso y prácticas sociales como demuestran por ejemplo los
hechos del mayo del 68 y el movimiento “Back-to-the-land” en EEUU (que han
influido mucho en sectores de la izquierda neoliberal demócrata americana que
ahora agoniza). Sin embargo, hay que ir con mucho cuidado pues la idea de que
“todo vale” es también extremadamente peligrosa. ¿Debemos aceptar una
representación del sistema económico desvinculado de las restricciones que las
leyes de la termodinámica o de la gravedad imponen en las actividades humanas?
¿Debemos aceptar y poner al mismo nivel las distintas visiones en una discusión
política como propone la Ciencia de la Sostenibilidad actualmente? ¿Se puede
tolerar que los cínicos y rencorosos abanderados de la democracia española y catalana
no hayan permitido en sus medios de comunicación que haya un verdadero debate
público y democrático donde se puedan discutir axiomas (del sistema educativo,
energético, ecológico, sanitario…) con todas las partes relevantes
representadas? -. No querido lector, vivimos en una sociedad que se pudre a
marchas exponenciales y… ¡Menos mal!
Bienvenido pues al maravilloso mundo de los axiomas y su codificación
semiótica como restricciones que enmarcan los aspectos normativos y
descriptivos que forman las diferentes “guías” para entender el mundo y sus
modelos. Espero que después de este apartado quede más claro a que me refiero
con estos términos, pero para ello hay que empezar con una breve definición y
un poquito de historia…
La semiótica estudia todo aquello relacionado con los signos, lo cual incluye
palabras, imágenes, sonidos, gestos y objetos como parte de sistemas integrados
de dichos signos. Es el estudio de cómo se genera el significado y como se
representa la realidad. Generalmente se consideran a Ferdinand de Saussure y a
Charles Sanders Pierce como a los dos grandes iniciadores de la disciplina.
Saussure se asocia más con la idea de semiología y dentro de esta la
lingüística. El propio Saussure lo
define de esta manera:
Es… posible concebir una ciencia que
estudia el rol que tienen los signos como parte de la vida social. Formaría
parte de la psicología social, y por tanto de la psicología en general.
Llamaremos a esta disciplina semiología (del griego semeîon, “signo).
Investigaría la naturaleza de los signos y las leyes que los rigen […]. Las
reglas que la semiología descubra se aplicarían a la lingüística, y la
lingüística tendría un papel claramente definido dentro del conocimiento humano
(Saussure en Chandler, 2007, pp. 3).
Por otro lado, el trabajo del americano Pierce tomó una perspectiva más
analítica y formal típica del mundo anglosajón y definiría a la semiótica de la
siguiente manera:
“La lógica, en su sentido general,
es… solamente otro nombre para la semiótica (sémeiötiké), la casi-necesaria o
formal doctrina de los signos. Descubriendo a la doctrina como casi-necesaria o
formal, me refiero a que observamos los caracteres de dichos signos como los
conocemos y… Por medio de un proceso al cual no pondré objeciones en llamar
abstracción, nos lleva a afirmaciones, eminente falibles, y por tanto no
necesarias, a los que deben ser todos los signos utilizados por la
“intelligentsia científica”, es decir, por una inteligencia capaz de aprender
de la experiencia” (Peirce 1931 en Chandler, 2007, pp. 3)”.
El problema de esta definición está en lo “eminentemente falible”. Aquí es
donde Peirce supone algo que el físico Brown de la universidad de Duke denuncia
magistralmente en su todavía incompleta obra Axiomas. Algunos axiomas fundamentales (llamémosles
meta-axiomas) no son falsables. En algunos casos la incertidumbre o la propia
ignorancia no lo permiten. ¿Cómo falsar los efectos del cambio climático que
tendrá en el futuro a distintas escalas espacio-temporales ante la
incertidumbre e ignorancia asociada a la predicción de un sistema
extremadamente no-lineal y que no entendemos por completo (lo cual no significa
que no nos deba preocupar sino todo lo contrario si aplicamos el principio de
precaución)? En otras ocasiones los
axiomas están diseñados para que no sean falsables. Alguien que crea que no
existe el libre albedrío porque estamos controlados por un ser superior no es
posible de refutar. Cualquier intento de intentar falsificar eso podría ser
respondido con un “te lo ha hecho creer el diseñador”. Es posible que dicha
persona no pueda probarlo, pero al no poderse falsificar queda la duda y por
tanto la posibilidad de que el axioma sea cierto. Al menos hasta que no se
pueda falsificar lo que implicaría que el diseñador bajar y nos digiera que
efectivamente estamos controlados en todo momento y que cualquier intento de
rebelión será reprimido. No conozco personalmente al diseñador si es que existe,
pero mantengo la posibilidad abierta de la duda, aunque me parece poco creíble
y un tanto maquiavélica (cosas de mi optimismo naturalista, que le vamos a
hacer…).
La cuestión de los axiomas es fundamental pues va a definir como
representamos la realidad, especialmente en los asuntos más espinosos que
tratamos en este blog en relación a la sostenibilidad. La teoría de la
jerarquía (hierachy theory en inglés)
es la disciplina que estudia el aspecto epistemológico de los sistemas complejo
y que afirma que “es imposible representar un objeto complejo en términos
sencillos sin perder información relevante” (Giampietro,
Mayumi, & Sorman, 2012, pp. 63). Cuando representamos un fenómeno u objeto
complejo necesitamos usar “narrativas, dimensiones y escalas no equivalentes”
dado que “describir los asuntos sobre sostenibilidad en términos científicos
require comprimir una cantidad infinita de información en un espacio
informativo finito”. Esto significa que la complejidad, lejos de ser entendida
como lo hacen por ejemplo en uno de los centros pioneros mundiales (El Instituto
de Santa Fe de la Universidad de California) como una propiedad inherente de
los sistemas humanos y naturales (con propiedad que los hacen poco predecibles
dado su carácter no-lineal, emergente, multi-escala…) es una posición
epistemológica que se deriva de la necesidad de dar una respuesta adaptativa
funcional en las respectivas tareas del día a día.
Esta idea de complejidad nos lleva a un dilema que es el que a un servidor
le ha hecho posponer ya dos veces la tesis de máster, la tensión dialéctica
entre reduccionismo y holismo analítico. Si bien el coste computacional-analítico
de tener modelos integrados es enorme (y su incertidumbre y cantidad de
supuestos aumenta cuanto más complejo es el modelo) existe la necesidad de no
acabar con el que voy a apodar como el “síndrome del sacerdote neoclásico”, es
decir el extremo reduccionismo que resulta de formalizar cuantitativamente unos
axiomas embedidos en una semiótica lingüística metafísica (en el sentido
peyorativo del término) en la que se axiomatiza a la economía como algo que
debe centrarse únicamente en variables monetarias cuantitativas y generalmente
en las dinámicas de la oferta, demanda y otras variables como el desempleo, la
inflación o los tipos de cambio. Así pues ¿Cómo podemos evitar que determinados
credos con agendas políticas perversas se apoderen del discurso y por tanto del
marco de actuación social de los diferentes agentes? Les presento a Robert
Rosen y su Teoría de modelación relacional (Modelling
relation theory en inglés).
3. LA TEORÍA DE MODELADO RELACIONAL DE ROSEN, CIBERNÉTICA Y AXIOMAS PRE-ANALÍTICOS
Mi tesis de máster consiste en analizar la
narrativa de la Ciencia de la Sostenibilidad desde sus inicios como disciplina
en 2001 con el artículo Sustainability Science liderado por dos académicos de
Harvard, Robert W. Kates y William C. Clark hasta hoy en día desde el punto de
vista de la semiótica realizando un análisis tanto de los axiomas de la
disciplina como de su consistencia interna (para ver si las “promesas” que se
establecieron axiomáticamente en éste y otros artículos principales se ha
cumplido)
El principio de complejidad espistemológica que he
introducido anteriormente al definir los sistemas socioecológicos como sistemas
complejos, cuya representación no es reducible a una narrativa unidimensional
(económica, ecológica, antropológica…) se refiere a una situación en la que “tiene
lugar cada vez que los intereses del observador (el objetivo del mapeado)
afectan lo que el observador ve (la formalización del problema científico y su
modelo resultante”. A partir de un paso pre-analítico el observador representa
una serie de atributos (o qualidades) del sistema de interés a analizar,
generalmente en forma de conceptos definidos formalmente (masa y presión para
un físico, tasa de reproducción para un demógrafo, precios y empleo para un
economista, entre otros). Este paso afectará la representación (sea cuantitativa
como en el modelo
MuSIASEM de análisis integrado del metabolismo social o cualitativa como
por ejemplo pasa con los Diagramas de
causalidad circular (CLDs en inglés) que se usan en Ciencias de la
Sostenibilidad para estructurar problemas).
Figura 1. Rosen’s modelling relation. Fuente: Kovacic (2015).
En este paso pre-analítico se articular toda una realidad semántica en
relación al objetivo que tiene el análisis en sí. El principio de variedad
requerida (principle of requisite variety
en inglés) exige que la representación en un sistema cibernético sea tal
que sea capaz de adoptar una serie de atributos (parámetros) que den una
respuesta ante una perturbación para dar una respuesta útil conforme a los
objetivos del sistema como es el caso de un aire acondicionado que se
auto-regula en función de la temperatura interna de un piso.
Los matemáticos Gödel y Tarski han demostrado que los intentos de
formalizar un sistema sin referencia semántica (que no son más que axiomas en
relación a creencias y valores humanos) han fracasado. El formalismo matemático
o de otro tipo no es suficiente para la representación de un sistema (Giampietro,
Mayumi, & Sorman, 2011, pp. 67).
Volviendo a Peirce, el académico americano introdujo en 1935 el concepto de
relación semiótica triádica como “el proceso en que las representaciones útiles
son continuamente seleccionadas y validadas a partir de un proceso de
interacción con el mundo externo”. La representación semiótica se basa en tres
pasos (Giampietro,
Mayumi, & Sorman, 2011, pp. 67-68):
- - Transducción semántica: se trata de codificar la información asociada con
los signos escogidos (palabras, iconos, slogans…) en relación a un sistema
semiótico específico (lingüístico, musical, visual…).
- - Representación sintáctica: se trata de formalizar las relaciones entre
símboles a partir de una serie de axiomas del sistema en cuestión (por ejemplo,
el propio modelo de Rosen asume que la causalidad existe, que podemos observar
la realidad y otros muchos axiomas implícitos).
- - Aplicación pragmática: es el paso de actuar y tomar partido
interactuando con la realidad
En este proceso los sistemas socioecológicos tratan de incrementar sus
probabilidades de supervivencia fragmentando la realidad en partes más pequeñas
para las que se desarrolla un sistema de conocimiento específico. Un pianista
lo hace formándose durante años en una academia donde debe pasar desde una
interpretación romántica con una semiótica más abierta hasta el formalismo más restringido
de un clasicista como Mozart. Un perro se guiará por su olfato y su agudo
sistema auditivo para la toma de decisiones. Vemos pues con estos dos ejemplos triviales
la aplicación del concepto de filtro epistemológico que he definido con
anterioridad.
Este paso pre-analítico en las elecciones normativas está en el centro de
la relación de modelado de Robert Rosen. Una vez tomado el paso pre-analítico
(relacionado con la percepción) en el que se definen un conjunto de supuestos
básicos (axiomas) para "los que el observador espera observar", se
lleva a cabo el proceso de codificación de atributos relevantes (cualidades)
del sistema observado. El tercer paso denominado inferencia consiste en una
"formalización de las relaciones causales idealizadas atribuidas al
sistema observado en la fase pre-analítica" del sistema observado.
Finalmente, el cuarto paso de "decodificación prueba la coherencia entre
la percepción de causalidad sobre los cambios de estados del sistema observado
y los resultados del modelo anticipatorio proporcionado por el sistema
formal" (Kovacic, 2015, pp. 38). Si las predicciones (fase pre-analítica)
son consistentes con el modelo formal creado por el observador (codificación-inferencia-decodificación),
se dice que la representación alcanza el "cierre semántico" o semantic closure en inglés (Diaz-Maurin
& Kovacic, 2015; pp. 211).
La relación de modelado de Rosen (ver figura 3) se aplicó recientemente al
controvertido caso de la energía nuclear y su pluralidad de narrativas. Los
principales hallazgos revelaron que hay una falta de cierre semántico, es
decir, que existe una incoherencia entre el paso pre-analítico y los pasos de
codificación-formalización-decodificación o entre las expectativas y la percepción
y la experiencia empírica en que "la representación de las centrales
nucleares se basa en la creencia de que, por ejemplo, la electricidad producida
con centrales nucleares es “demasiado barata para medir” (el too cheap to meter inglés), que las
centrales nucleares pueden ser más seguras en respuesta a accidentes
"mientras que la experiencia muestra que" la construcción y el
funcionamiento de las centrales nucleares tienen considerables costos y que la
gran escala y el largo tiempo requerido para construirlas hacen que las plantas
existentes no respondan a los nuevos requisitos de seguridad y conduzcan a una
situación de bloqueo tecnológico (o lock-in
en inglés) "(Diaz-Maurin & Kovacic, 2015, pp. 211). Por lo tanto, no
se llega a un cierre semántico entre la percepción esperada y la evidencia empírica,
como muestra el artículo de manera que se pervierte el proceso semiótico al
servicio de las narrativas de ciertos lobbies poderosos.
Figura 2. La existencia de percepciones y representaciones no equivalentes del mismo sistema de observación. Fuente: Kovacic (2015, pp. 39).
Una vez definido muy brevemente el modelo de Rosen veamos cómo nos puede
ayudar en dos ejemplos a entender que es lo que está pasando con la cuestión de
la “independencia” y la propia disciplina de la Ciencia de la Sostenibilidad y
como a través de una manipulación (consciente o inconsciente, lo dejo a
elección del lector) Semiótica del lenguaje nos lleva a la ruina en cuanto a la
propuesta de soluciones que excluyan la extinción humana en este siglo, a la
que parece que vamos de cabeza por pura inercia ahora mismo.
4. EL CASO DE LA CIENCIA DE LA SOSTENIBILIDAD Y LA INDEPENDENCIA DE CATALUÑA
En la siguiente tabla se muestra una operacionalización de la MDR de Rosen
y como lo aplico en mi tesis de máster.
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Description
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Aplicación
metodológica
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PERCEPCIÓN
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La observación empírica preanalítica del narrador en la que se establecen
un conjunto de supuestos básicos (axiomas) en relación con el propósito del
análisis incrustado en un sistema semiótico (lenguaje académico escrito en
este caso con su sintaxis, pragmática y semántica asociadas).
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Los axiomas del núcleo se identifican mediante un análisis de Kates et.
Al (2001) documento fundacional en relación con el concepto de Desarrollo
Sostenible, algunas de sus referencias, algunos artículos seleccionados que
conducen a este documento fundamental y un conjunto de artículos clave de la
disciplina de 2001 a octubre de 2017.
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CODIFICACIÓN
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Representación semántica y definición de cualidades / atributos clave del
sistema observado que se formalizará en el paso 3 incrustado en un sistema
morfosintáctico (palabras clave o frases clave).
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Las categorías semánticas clave que definen el proceso analítico formal
de la Ciencia de la Sostenibilidad se identifican mediante un análisis
semántico multinivel de Kates et. Al (2011) documento fundacional y otros
artículos clave de la disciplina.
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INFERENCIA
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Formalización de los atributos / cualidades clave en el conjunto 2
mediante representaciones cualitativas o cuantitativas en modelos, marcos,
enfoques y otros medios formales de aprehensión de la realidad en la Ciencia
de la Sostenibilidad.
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Análisis de documentos relevantes clave muy citados en los que se
presenta una formalización de una o más de las categorías semánticas clave en
el paso 2.
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DECODIFICACIÓN
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Verifique la consistencia de las observaciones empíricas y las
predicciones anticipadas en la representación formal y la revisión de la
percepción pre-analítica de la Ciencia de la Sostenibilidad.
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Resumen de los trabajos de investigación 2001-2017 que cubren el proceso
de monitoreo y reporte de la Ciencia de la Sostenibilidad y sus hallazgos +
Revisión de documentos de investigación identificados que discuten las
instituciones y la infraestructura.
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Tabla 1. Operacionalización de la teoría de modelado relacional de Rosen. Elaboración propia.
Los resultados preliminares que tengo después de analizar algunos de los
artículos y documentos más importantes que han caracterizado la narrativa de la
ciencia de la Sostenibilidad desde sus inicios apuntan a que hay serios
problemas en cada uno de los 4 pasos. Por lo que se refiere al paso
pre-analítico estoy observando cómo se selección la narrativa del “Desarrollo
Sostenible” como axioma normativo de forma jerárquica (no hubo un proceso de
participación donde distintas partes pudieran ofrecer un control de calidad
semántico sobre esa narrativa) por un puñado de investigadores (Robert W. Kates
y William C. Clark principalmente). Así pues, eso entra en contradicción con
otro de los axiomas que la propia disciplina se auto-impone, la de entender las
interacciones entre la naturaleza y la sociedad ya que dado que se asumo el
discurso del Desarrollo Sostenible pro-crecentista hay una falta de discusión
total en las cuestiones de las restricciones de tipo source (es decir los límites a la extracción de materiales y
energía limitados a su vez por la termodinámica y las característica geológicas
y geográficas terrestres). Es por eso que todo el debate sobre la cuestión de
límites termodinámicos no ha sido nunca debatido de forma adecuada en jornales
académicos como Sustainability Science o la sección de sostenibilidad del PNAS
(Procedures of the National Academy of Sciences) de los EEUU.
Esta sesgada visión pre-analítica hace que la codificación semántica de los
atributos sea incompleta (se obvia hablar de ciertos temas y se enfatizan
otros) los cuales tienen que ver también con la formación de los científicos
líderes de la disciplina, contribuyendo a un reduccionismo semiótico muy
peligroso. De este modo en el paso a la formalización no se consiguen algunos
de los objetivos que se marca la propia disciplina como son los de ofrecer un
buen análisis descriptivo de las interacciones naturaleza-hombre que he
mencionado antes o que no se cumpla el deseo de ser una disciplina realmente
transdisciplinar pues no se incluyen muchos aspectos y disciplinas (como es la
propia semiótica y lingüística y como esta puede contribuir a mejorar la
calidad de la narrativa). Finalmente, tampoco se ha generado un marco en el que
hacer un análisis sistemático de la disciplina. 16 años después de su inicio no
hay ningún artículo ni tesis que haya analizado en profundidad si las preguntas
que planteaba la disciplina se han cumplido (ver abajo).
What are some of the assumptions for the framing of the core questions?
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What has been the
contribution of SS in constructing integrated models and
conceptualizations that help understand human-nature interactions in relation
to the Earth System, Development and Sustainability?
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What has been the
contribution of SS in identifying discussing and managing long-term trends
in relation to sustainability?
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What has been the
contribution of SS in relation to the vulnerability and resilience of
nature-society systems for ecosystems and human likelihoods?
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What has been the
contribution of SS in relation to the identification and response to "limits"
or "boundaries"?
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What has been the
contribution of SS in suggesting incentive structures guiding
effective sustainability trajectories?
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What has been the
contribution of SS in suggesting integrated monitoring and reporting
systems for guiding for sustainability?
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What has been the
contribution of SS in integrating research tasks for fostering adaptive
capacity and societal learning?
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Tabla 2. Preguntas de la Ciencia de la Sostenibillidad
Estos días hemos podido observar algo parecido en los discursos sobre la
propia independencia de Cataluña. Por un lado, tenemos un rey que ha apelado a
la “unidad de España” (axiomas, hola de nuevo) y por otro lado a un president que en su discurso de
no-proclamación de la independencia hizo una referencia al déficit fiscal, pero
ninguna por ejemplo a la cuestión de que sistema monetario quedaría
hipotéticamente o del superávit comercial y como éste quedaría. No ha existido
ningún debate público en ninguna televisión pública debatiendo sobre qué modelo
energético, sanitario, educativo… deberíamos tener en esa república catalana y
se ha llevado todo a un terreno simbólico de banderas y abstracciones
históricas utilizando numerosas artimañas manipulativas como las que comenta Dmitry
Orlov en un reciente artículo. Estamos pues ante un reduccionismo semiótico
que históricamente ha acabado muy mal, en conflicto y con muchos damnificados
en el mundo tanto natural como social.
5. EL BAILE DE LOS META-AXIOMAS
Ha habido numerosos filósofos que han intentado discutir sobre la cuestión
de los axiomas y la gran mayoría han fracasado. Quizás los casos más claros son
los de René Descartes y Edmund Husserl. El primero axiomatizó a través del
lenguaje una serie de principios que legitimaban un cambio de los axiomas del
sistema social del siglo XVII en plena “revolución científico-capitalista” sin
destruirlos por completo. No se podía poder dudar de que él dudaba (aunque en
ningún momento se demuestra eso) y eso era atribuible a un dios. Ese dios
garantiza un optimismo científico como salvador de la humanidad (de la cual se
tiene una visión pesimista y condicionada por pecados originales) materializado
a través de las matemáticas de forma reduccionista. Se sigue con la misma idea
del cristianismo, pero con distintos curas (primero físicos y matemáticos y
algún filósofo burgués o marxista, hoy economistas neoclásicos). Laplace
acabaría ofreciendo la versión más radical de los atisbos que tuvo Descartes
cuando afirmó:
"Podemos considerar el estado
actual del universo como el efecto de su pasado y la causa de su futuro. Un
intelecto que en un momento determinado conociese todas las fuerzas que ponen
la naturaleza en movimiento, y todas las posiciones de todos los elementos de
los que está compuesta la naturaleza; si este intelecto fuera lo
suficientemente vasto como para someter estos datos al análisis, se abarcaría
en una única fórmula los movimientos de los cuerpos más grandes del universo y
los del átomos más pequeño; para tal intelecto nada sería incierto y tanto el
futuro como el pasado estarían presentes ante sus ojos
En realidad, lo que buscaban los optimistas racionalistas no es más que
intentar demostrar que no había que demostrar que la razón y sus axiomas no
deben ponerse en duda y de que operan con independencia de lo empírico y que
son por tanto desvinculables de una visión pre-analítica en el marco
descriptivo-normativo. Han fracasado estrepitosamente como la propia ciencia
(ese mismo instrumento que entronaban) les ha dado unas cuantas bofetadas. Un claro ejemplo nos lo de la física cuando las leyes de la mecánica clásica newtoniana no funcionan a escalas más pequeñas (el mundo cuántico) o más grandes (el mundo relativista).
Por tanto como denuncia Brown se consiguen camuflar axiomas como por
ejemplo en el hecho de que hay ciertos principios que son tan evidentes que no
necesitan demostración. Un claro ejemplo práctico
es el fantástico
artículo de Yanis Varoufakis en el que se denuncia el proceso por el cual
los economistas no abandonan tres de sus axiomas fundamentales con una pirueta
intelectual nada desdeñable para protegerse de los herejes que no pensamos como
ellos.
6. CONCLUSIÓN
A día de hoy no tenemos una ciencia basada en una sólida discusión de su Semiótica y de los axiomas asociados a los procesos de significación semántica,
formalización semántica y aplicación pragmática. Vamos muy tarde y es
lamentable el trabajo que se ha hecho desde las universidades a todos los
niveles excepto algunas contadas excepciones de las que tenemos la suerte de
contar en España (grupo de Energía, Economía y Dinámica de Sistemas en
Valladolid; los proyectos MEDEAS en el CSIC Y MAGIC en la UAB). Esta debería
ser a mi juicio la tarea de un grupo específico de científicos-activistas. Los
que se dedican a tratar temas de filosofía de la ciencia (autores como Jerome
Ravetz, Andrea Saltelli o Silvio Funtzow-izc), los que nos dedicamos a la
ciencia de la sostenibilidad (tal y como la he definido yo y no como la
decidió, a la vista de mis observaciones preliminares, la intelligentsia de
Harvard), aquellos que estudien la Semiótica en sus distintas ramas y
finalmente aquellos que están intentando crear una ciencia integradora del
cambio cultural (Joe Brewer y otros). Es a partir de estas tareas todavía por
hacer en las que podremos reformar el proceso científico para que este se de
mayor calidad y honestidad a la hora de la toma de decisiones.
Esto está provocando que no se pongan encima de la mesa debates públicos muy urgentes como estamos viendo con todo el caso de la independencia de Cataluña y que sin duda alguna se atisbe un colapso descontrolado del estado español en pocos meses o años. Estamos a mi juicio en una situación similar al del final de la segunda república (aunque evidentemente en un contexto socio-ecológico y un orden geopolítico y económico mundial muy distintos). Así que...
¡Larga vida a la discusión de los axiomas! O como lo pone Brown de forma
más poética:
So choose your axioms wisely my friend, examine them often
for leaks.
Bail them out like a foundering float, burn the boat if it
creaks.
Challenge the cherished old words, my friend, challenge the
new ones too.
Avoid all beliefs that lead you to grief, and keep all the
best ones for you.
Escoge tus axiomas de forma sabia mi amigo, examínalos en busca de fallos.
Socórrelas como a un flotador en lucha, quema el barco si pasa apuros.
Desafía a las antiguas vanagloriadas palabras , amigo mío, y desafía las nuevas también.
Evita todas las creencias que te han llevado al duelo, y mantén las mejores para ti.
Los economistas neoclásicos utilizan los problemas creados por la aplicación de sus teorías, (paro, pobreza, ansiedad posicional, explotación social y ambiental), como prueba de que son necesarias esas mismas "herramientas" teóricas porque son las que manejan las variaciones en esos problemas: es cuestión de modificar parámetros sin salirse del mismo marco de axiomas. Si nos eligen qué problemas deben importarnos el poder sigue intacto.
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